Destino recomendado: Huarmey

La Ciudad de la Cordialidad

Por Grace Gálvez

Luego de recorrer minuciosamente el mapa del Perú pensando a dónde huir, descubrimos un paraíso a solo 293 kilómetros al norte de Lima. Huarmey, provincia de Áncash, es una ciudad apacible que esconde una serie de maravillas naturales: las sublimes playas de Tuquillo.

Nuestro bus partió a las 23:30 horas desde el terminal terrestre de Plaza Norte y arribamos a Huarmey en menos tiempo de lo previsto. Lo que pensamos sería un viaje de cinco o seis horas, se transformó en uno de cuatro. Llegamos al terminal de la Ciudad de la Cordialidad a las 3:30 de la madrugada.

Tras esperar a que aclare un poco, iniciamos la búsqueda de nuestro albergue. El precio de los hospedajes para turistas va desde los 25 soles en adelante dentro del pueblo de Huarmey. Sin embargo, si se desea alojar frente al mar encontrará un solo hotel cuyas habitaciones tienen un costo más elevado.

Una vez instalados decidimos recorrer la Plaza de Armas y el mercado para saborear la cultura y la comida. Todo resultó exquisito. El menú cuesta de 4 soles a más, todo bien servido y con excelente atención.

Al día siguiente enrumbamos hacia Tuquillo en los station wagon que parten desde la Plaza. El precio del pasaje por persona es de 2.50 soles y el recorrido dura menos de 10 minutos. Al llegar nos encontramos frente a un mar bellamente sosegado y limpísimo: el sueño de todo nadador de agua salada.

Y para completar la maravilla, en el lugar se puede encontrar una gran variedad de restaurantes que ofrecen platos marinos y criollos a la carta, con precios que van desde los 12 soles aproximadamente.

Ya entrada la tarde, cuando el sol está menos impetuoso, se puede hacer una caminata por los alrededores, donde hallarán pequeños ecosistemas con estrellas de mar, peces coloridos, caracoles, cangrejos y otras especies marinas en las orillas y riscos cercanos.

No se puede pedir más. Huarmey es el destino recomendado para este último mes de verano pues ya no hay muchos turistas y con poco presupuesto se puede disfrutar de todas sus bondades. Asimismo, se trata de una comunidad segura y tranquila, dedicada a recibir a sus visitantes con su distinguida cordialidad.